Delicioso Chipá dorado con aceite: Una receta sabrosa y fácil de preparar

Ajajá, ¿quieren una receta rica que los haga babear? Bueno, les tengo una propuesta tentadora: ¿qué tal si les enseño a hacer unas deliciosas chipas con aceite? Sí, sí, unas de esas bolitas de queso que son tan famosas en Paraguay y que no vas a poder dejar de comer una tras otra. ¡Ya te imagino babeando!

Pero antes de que empieces a manosear el teclado, déjame darte todos los detalles para que anotes y te prepares para una experiencia culinaria inolvidable.

Información previa

• Número de comensales: Depende de cuánto puedas resistir comer antes de que desaparezcan.
• Dificultad: Fácil. Si hasta el más torpe de la cocina podría hacerlo. ¡Sos un capo, no hay excusas!
• Tiempo estimado de preparación: Unos 30 minutos. Pero te advierto, no vas a poder esperar tanto para probarlas.

Ingredientes

• 500 gramos de almidón de mandioca. Sí, sí, ese polvo mágico que hace que las chipas queden bien ricas.
• 200 gramos de queso Paraguay. Si no conseguís, cualquier queso semiduro que se derrita bien te va a servir.
• 3 huevos. Los huevos son como la glue que une todo en esta receta.
• 200 ml de leche. Sí, leche. No te preocupes, no te vas a poner a amamantar a ninguna vaca.
• 4 cucharadas de aceite. El aceite es ese ingrediente que les da ese toquecito especial a nuestras chipas.
• Sal al gusto. No te pasés con la sal, no queremos deshidratarte, pero tampoco queremos que te queden insípidas.

Pasos de preparación

1. Primero, precalentá el horno a 200°C. No seas ansioso, dale tiempo al horno para que se caliente bien.
2. En un bowl bien grandote, mezclá el almidón de mandioca y el queso rallado. Agregá una pizca de sal.
3. En otro bowl aparte, batí los huevos y agregá la leche junto con el aceite.
4. Mezclá bien todos los ingredientes hasta que se forme una masa homogénea. No tengas miedo de usar las manos para amasarla bien.
5. Si la masa está muy seca, podés agregar un poquito más de leche. Si está muy pegajosa, agregá más almidón.
6. Tomá porciones de la masa y formá bolitas del tamaño de un bocado (o del tamaño de tu apetito).
7. Colocá las bolitas en una bandeja para horno previamente engrasada o con papel manteca.
8. Llevá la bandeja al horno y dejá que las chipas se doren durante aproximadamente 15 minutos.
9. Cuando estén doraditas y con ganas de ser degustadas, sacá la bandeja del horno y dejá que se enfríen un poco antes de comerlas.
10. Aprovechá y disfrutá tus chipas con aceite aún calentitas y bien crocantes. ¡Indescriptibles!

Beneficios de las chipas con aceite

Ajá, pero aparte de hacer que se te haga agua la boca, estas chipas tienen sus beneficios. Primero que nada, su sabor es tal que te va a hacer dar saltitos de alegría. Segundo, al tener queso son una excelente fuente de calcio, así que te van a ayudar a mantener tus huesos fuertotes. Y tercero, vamos a ponerle que tienen beneficios para el estado de ánimo, porque qué mejor manera de ser feliz que comiendo una chipa con aceite. ¡Dame diez!

Recomendaciones y consejos

Ahora, un par de tips para que tus chipas queden siempre espectaculares. Primero, no escatimés en queso. Mientras más queso, más ricas. Segundo, si tenés la suerte de conseguir un buen queso Paraguay, usalo, porque la diferencia se nota (y mucho). Y tercero, no te olvides de servirlas con una buena taza de mate bien caliente. ¡Se llevan de maravilla!

Curiosidades sobre las chipas con aceite

¿Sabías que las chipas son un emblema de la gastronomía paraguaya? Sí, son como pequeñas obras de arte culinario que te transportan directamente a ese país sudamericano. Además, allá la chipa se come en todas partes y en cualquier momento del día. ¡Son fanáticos!

Bueno, querido lector, espero que te haya dejado con tantas ganas de hacer estas chipas como a mí. Ahora es tu turno de desplegar tu talento culinario y dejarnos a todos boquiabiertos con tus deliciosas creaciones. Hasta la próxima, ¡y no te olvides de compartir tus experiencias en los comentarios!